Jonas: Yo
te vi. Eras una niña. Me miraste directo como si también pudieras verme.
Martha:
¿El armario?, ¿eras tú? No fue un sueño, ¿crees que quede algo de nosotros o
seremos solo eso, un sueño?, ¿nunca existimos?
Jonas: Yo
no lo sé.
Martha: …
Jonas: Hechos
el uno para el otro. Nunca dudes de eso.
Permanecen agarrados de la mano mientras sus cuerpos
empiezan a desintegrarse. Alrededor todo está en silencio, no existe nadie
más.
La cámara se aleja lentamente. Desaparecen.
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